Qué hacer si su pez Betta no está comiendo

Un pez betta que no está interesado en comer es un problema común para muchos propietarios de betta. Afortunadamente, hay algunas cosas que puede investigar antes de necesitar pedir ayuda a un veterinario. La mayoría de estos se relacionan con la cría inadecuada o con qué tan bien cuidas a tu pez beta. Hacer algunos pequeños cambios lo antes posible mejorará considerablemente las posibilidades de que su pez beta vuelva a comer normalmente.

Causas de que el pez Betta no coma

Hay algunas causas por las que su pez betta puede no estar comiendo. También puede ser una combinación de los siguientes factores:

Calidad del agua

Los peces que tienen agua de mala calidad se estresan. Debido a que los peces no pueden escapar de este entorno, aunque algunos pueden saltar de su tanque o cuenco al intentar hacerlo, la exposición constante al agua en mal estado resulta en un estado de estrés crónico. Con el sistema inmunológico de un pez sobrecargado por estrés, no se sienten bien y, como resultado, tienen una función inmunológica más baja, un menor esfuerzo reproductivo y crecimiento, y un apetito reducido.

Afortunadamente, la mala calidad del agua es una de las cosas más fáciles de arreglar. Saque su pez beta de ese cuenco anticuado y colóquelo en un acuario filtrado y calentado de cinco a diez galones. Pruebe la calidad del agua con regularidad con un kit de prueba a base de líquido y realice su mantenimiento regular para que los parámetros de calidad del agua se mantengan dentro de los rangos normales.

Alimentos de mala calidad

Ningún pez beta jamás terminará un recipiente de comida para peces beta de manera oportuna. Si los contenedores fueran del tamaño apropiado, ¡nunca los encontrarías en los estantes de las tiendas de mascotas! Después de unos seis meses, los alimentos para peces perderán la mayor parte del contenido de vitaminas solubles en agua, incluida la vitamina C. Sin mencionar que todos los alimentos se vuelven rancios después de abrirse repetidamente todos los días. Los bettas confían en su sentido del olfato para encontrar su comida y, si está envejeciendo, no huele muy bien.

Todos los bettas deben ser alimentados dos o tres veces al día. Use una dieta fresca granulada que se reemplace al menos cada seis meses. Debido al tamaño variable de los gránulos, alimente tantos gránulos por comida que, en teoría, podrían caber en uno de los globos oculares de su pez.

Alimentar alimentos viejos durante demasiado tiempo puede tener graves consecuencias para la salud de los peces. Los alimentos viejos pierden su valor nutricional, especialmente las vitaminas. Sin las vitaminas C y E que estimulan el sistema inmunológico, su pez es significativamente más propenso a infecciones secundarias del entorno circundante.

Sobrealimentación

Algunos bettas tienen ojos más grandes que sus estómagos y felizmente consumirán todos los bocados en su tanque. Sin embargo, si su metabolismo no puede mantener el ritmo, los alimentos comienzan a acumularse y pueden causar problemas gastrointestinales graves. Los bettas sobrealimentados pueden presentarse con vientres muy distendidos y necesitarán ayuda lo antes posible. Los bettas deben ser alimentados dos veces al día, pero solo una pequeña cantidad de alimento cada vez: aproximadamente tantos gránulos como igualarían el tamaño de su globo ocular. Cualquier alimento no consumido que quede en el fondo del acuario debe eliminarse con una red o una aspiradora de grava.

Temperatura inapropiada

Los bettas son peces tropicales y, por lo tanto, requieren un calentador en su tanque. Los peces mascota son ectotermos, lo que significa que su metabolismo y función inmunológica dependen de la temperatura ambiental circundante. Varias especies de peces tienen un «punto óptimo» para los rangos de temperatura con el fin de gozar de una salud óptima. Los bettas requieren calor alrededor de 78 a 82 grados Fahrenheit (25 a 28 Celsius). Asegúrese de utilizar un calentador de acuario comercial diseñado para el tamaño de su acuario. Los calentadores más grandes pueden ser demasiado grandes para el pequeño volumen de agua de un acuario Betta, así que asegúrese de verificar el funcionamiento de su calentador colocando un termómetro sumergido en el tanque de su betta.

Si no tiene un calentador y su agua está demasiado fría, su pez beta no puede digerir adecuadamente su comida. Esto puede provocar una impactación donde el tracto gastrointestinal (GI) se llena de comida y no puede salir del pez. Los peces afectados presentarán vientres muy distendidos y necesitarán ser examinados por un veterinario acuático.

Competencia

Los peces betta son conocidos por defender con saña su territorio. Los bettas machos nunca deben mantenerse juntos o incluso a la vista el uno del otro. Algunas hembras bettas también pueden ser muy agresivas, dependiendo de su temperamento individual. Los peces que están demasiado preocupados por sus compañeros de tanque pueden estresarse fácilmente y dejar de comer.

Enfermedad y enfermedad

Incluso con la mejor atención y alojamiento, su pez beta aún puede enfermarse. Si ha marcado todos los puntos anteriores y aún no puede averiguar qué es lo que está mal, es hora de llamar a un profesional. Especialmente si observa otros signos graves de enfermedad, como letargo, cambio de color, roturas o desgarros en las aletas o piñas en las escamas. Cuanto antes obtenga la ayuda de su betta, mejor será el pronóstico.

Tratamiento

Si nota que su pez beta no está comiendo, lo primero que debe hacer es probar la química del agua. Si alguno de sus parámetros está desactivado, especialmente la temperatura, tome las medidas necesarias para corregirlo lo antes posible. Recuerde, cualquier cambio en el pH o la temperatura debe realizarse muy lentamente para que no golpee a sus peces.

Si la calidad del agua está dentro del rango normal, evalúe la dieta de su pez beta. ¿Cuándo lo compraste? ¿Se ve y huele como cuando lo compró por primera vez? Cualquier dieta sospechosa o antigua debe ser reemplazada.

Una vez que haya evaluado cualquier problema ambiental o dietético, debe Llame a su veterinario acuático para obtener orientación y diagnósticos adicionales..

Cómo prevenir la disminución del apetito

El mejor método para asegurar un betta feliz y saludable es alojarlos en un acuario filtrado y calentado, mantener la química del agua dentro del rango y alimentarlos adecuadamente. Si tiene alguna inquietud sobre su salud o su manejo, comuníquese con su veterinario acuático local.