Los cachorros de razas grandes, como los labradores, son tan felices y tan grandes que moverlos felizmente puede golpear la punta de la cola y hacer que sangre. Una cola dolorosa puede interponerse en el camino de la conversación adecuada.
Las colas de las mascotas también se pueden cerrar en las puertas, pisar o lastimar de otra manera. Una vez lesionadas, las colas son muy propensas a volver a lesionarse y pueden permanecer adoloridas y maltratadas.
Encontrar la herida
El cabello puede ocultar la herida y puede enredarse con sangre. Si su perro lo tolera, empape suavemente la cola con agua fría para eliminar cualquier resto adherido o sangre seca. Esto ayudará a limpiar la herida y también a identificar dónde está. Si su perro siente mucho dolor, es mejor buscar tratamiento veterinario de inmediato y evitar hacer algo más que pueda causar dolor o angustia.
Tratamiento de la lesión por cola de perro
Enjuagar la herida con agua fría ayudará a retardar el sangrado y reducir la inflamación. Luego seque suavemente la cola con un paño limpio si su perro lo tolera. También puede intentar aplicar un cubo de hielo en el área para adormecer el dolor y reducir la hinchazón.
Una vez que la herida esté limpia y seca, lleva a tu perro al veterinario. Su veterinario puede recomendar la mejor medicación y tratamiento para la lesión específica de su cachorro, así como medidas preventivas continuas para evitar una nueva lesión.
Prevención de traumas futuros
Un collar electrónico puede evitar que mastique, lama o interrumpa la curación de una lesión en la cola. Algunas lesiones requieren que se ampute la punta de la cola dañada si se vuelve a lesionar repetidamente, o si el daño es demasiado grave para que sane. Si eso sucede, el pelaje tiende a crecer sobre la punta y oculta la pérdida. Tu mascota nunca se perderá el eslabón perdido.
Realice algunos cambios en el entorno del perro para evitar que se repita el trauma de la cola. Recuerde que si se lastima las colas del tamaño de un cachorro, una vez que crece, aumenta el potencial de lesiones (y daños en el hogar). Los perros más grandes necesitan áreas más grandes donde puedan mover la cola sin golpear las paredes o limpiar la mesa de café.