La evidencia anecdótica sugiere que los gatos pueden llorar cuando están molestos o afligidos. Es cierto que los ojos de los gatos a veces se ponen llorosos. Y los gatos pueden y tienen emociones; ellos también se afligen. Pero si has visto a un gato con los ojos llorosos aproximadamente al mismo tiempo que tiene motivos de duelo, probablemente sea solo una coincidencia.
Las emociones de los gatos son reales
Los investigadores han descubierto que los gatos, de hecho, tienen emociones. Pueden leer las expresiones faciales humanas y pueden experimentar una amplia gama de sentimientos sobre humanos y otros animales. Cuando tienen sentimientos, pueden actuar sobre ellos. Por ejemplo:
- Un gato feliz puede ronronear, frotarse, jugar o relacionarse con humanos y otros animales.
- Un gato triste puede retraerse, perder el apetito o perder energía.
- Un gato enojado o asustado puede silbar, arquear la espalda, gruñir o golpear a una persona u otro animal.
Los gatos que están ansiosos, enojados o molestos pueden emitir sonidos similares a los gemidos o gemidos humanos. Estos ruidos son indicaciones de las emociones de un gato y, en ese sentido, el animal está llorando. Pero según los investigadores, los seres humanos son los únicos animales que lloran lágrimas cuando experimentan emociones fuertes o dolor.
La verdad sobre las lágrimas de los gatos
Los ojos de los gatos se «lagrimean» o lagrimean por varias razones, pero todas son médicas, no emocionales. Por ejemplo, puede deberse a la irritación de los ojos por una mota de polvo o un arañazo de otro gato. Las lágrimas también pueden ser causadas por enfermedades contagiosas, como infecciones de las vías respiratorias superiores. Los conductos lagrimales obstruidos (lo creas o no) también pueden provocar lagrimeo.
Otras posibles razones para los ojos llorosos de un gato incluyen:
- Conjuntivitis (ojo rosado)
- Infecciones
- alergias
- Problemas estructurales (los gatos con cabezas redondeadas son más propensos a llorar)
Si ves a tu gato llorando, es importante que sepas que no está expresando una emoción fuerte. En cambio, le están mostrando que algo anda mal desde el punto de vista médico. A menudo, el problema es menor. Sin embargo, en algunos casos, las lágrimas de gato pueden ser evidencia de un problema grave o algo que tiene el potencial de volverse grave sin tratamiento.
Si se producen desgarros con regularidad, es una buena idea visitar a su veterinario. Las caricias y la amabilidad, aunque siempre son bienvenidas, no harán nada para detener las lágrimas de tu gato.
Cuando tu gato está triste
Si bien los gatos ciertamente tienen emociones, como duelo o depresión, nunca derramarán lágrimas para mostrar esos sentimientos. Si te preocupan las emociones de tu mascota, busca otros signos como letargo, retraimiento o desinterés por la comida. Estos problemas también pueden ser un signo de enfermedad.
Antes de hacer suposiciones sobre el bienestar emocional de su gato, siempre dé el primer paso para verificar su salud física.